El equipo de venoclisis es un conjunto de dispositivos médicos utilizados para administrar líquidos, medicamentos, nutrientes u otros fluidos directamente en la corriente sanguínea de un paciente a través de una vena. Este procedimiento se conoce comúnmente como "colocación de una vía intravenosa" o "poner un suero".

El equipo de venoclisis típicamente incluye:

Aguja: es un dispositivo estéril que se inserta en la vena del paciente para permitir el acceso al sistema vascular.
Catéter intravenoso: una vez que la aguja ha penetrado en la vena, se retira dejando el catéter en su lugar para facilitar la administración continua de líquidos.
Torniquete: una banda elástica que se coloca alrededor del brazo del paciente para aumentar la presión venosa y facilitar la localización de una vena adecuada para la inserción de la aguja.
Tubos y conectores: se utilizan para conectar el catéter intravenoso a la bolsa o botella que contiene el líquido que se va a administrar.
Solución intravenosa: la solución que se administra puede ser suero fisiológico, solución salina, soluciones glucosadas, medicamentos diluidos, entre otros, dependiendo de las necesidades del paciente.

El equipo de venoclisis se utiliza en una variedad de situaciones clínicas, como administración de medicamentos, rehidratación, administración de nutrientes o transfusiones de sangre. Es importante que este procedimiento se realice correctamente para evitar complicaciones como la infección o la extravasación de líquidos. Por lo tanto, suele ser realizado por personal médico o de enfermería capacitado.