Una copa menstrual puede llegar a durar hasta 10 años. Aún así, muchas personas piensan que es demasiado tiempo y eligen cambiarla antes. También sucede que tienen dudas sobre cómo se ve una copa menstrual que está lista para reemplazar. En este artículo te hablaremos de los cuidados que debes tener con tu copa y te diremos las señales que indican que ya es momento de cambiarla.
Cuidando tu copa menstrual
La clave para que tu copa menstrual dure muchos años es saber cuidarla. Estos son algunos puntos importantes que debes tener en cuenta:
- Esteriliza tu copa. Hazlo cuando sea nueva y después una vez al mes, ya sea antes o después de tu periodo. Hacerlo más veces acorta la vida útil de tu copa, así que no la esterilices de más, no es necesario.
- Limpia tu copa menstrual durante tu menstruación. Cada que la vacíes y antes de volver a colocarla enjuágala con agua limpia. También puedes limpiar los agujeritos de la orilla con ayuda de un limpiador interdental. Tenemos un artículo donde te explicamos paso a paso cómo mantener limpia tu copa antes y después del periodo.
- Guarda tu copa en un lugar adecuado. Nunca la guardes en un recipiente hermético pues podría llenarse de hongos. Tampoco la dejes al aire libre en tu baño o recámara porque los productos que usamos pueden degradarla más rápido. Lo mejor para tu copa menstrual es la ventilación, así que utiliza una bolsita de algodón que la proteja de los elementos pero al mismo tiempo permita la circulación del aire.
- No te preocupes por el color. La sangre menstrual tiene altas cantidades de hierro, por lo que es normal que manche la copa. Esto no significa que esté sucia, así que no te preocupes. Si te molesta mucho puedes sumergir tu copa en agua oxigenada durante una noche, ¡pero ten cuidado! Hazlo solo una vez al año para no gastar de manera innecesaria el material de tu copa.
Señales de que hay que cambiar la copa
Cuando una copa menstrual se está acercando al fin de su vida útil hay algunas señales muy evidentes que te permitirán decidir que es momento de cambiarla.
- Mal olor que persiste a pesar de las lavadas.
- Manchas significativas.
- Descamación del material de la copa.
- Rasgaduras o grietas en cualquier parte de la copa.
- Textura granulosa.
- Fugas repentinas que no sucedían antes.
- Formación de una película pegajosa o aceitosa.
Si identificas alguna de estas señales lo más recomendable es cambiar tu copa menstrual.
Otras razones para cambiar la copa
Además de la degradación de la copa menstrual y el fin de su vida útil, existen otros motivos por los que una mujer podría decidir que cambiarla es lo mejor.
Cambias de talla. Se puede necesitar otra talla dependiendo de la etapa en la que se está. Por ejemplo, durante la gestación el piso pélvico cambia y puede ser que se necesite una copa más grande. De igual manera, perder o ganar peso rápidamente en poco tiempo afecta los músculos pélvicos, haciendo que se necesite otra copa menstrual.
No te sientes cómoda con tu copa actual. Puede ser que a la primera no encuentres la talla o el material adecuado para ti. Esto suele desanimar a muchas mujeres, pero lo mejor es que sigas intentando encontrar la copa ideal. Aunque el gasto de entrada puede resultar intimidante, recuerda que a la larga es más barato que usar toallas o tampones.
Usaste limpiadores agresivos. Quizá por desconocimiento pensaste que era necesario limpiar tu copa menstrual con productos agresivos, pero ahora sabes que no es necesario. Basta con esterilizarla una vez al mes y enjuagarla durante tu periodo. En todo caso podrías usar jabón neutro, pero no es realmente necesario.
Se te cayó la copa al inodoro. Cuando eres primeriza es muy común que al vaciar el contenido se caiga la copa al inodoro. Si esto sucede, lamentablemente tendrás que cambiar tu copa. Aunque puedes hervir tu copa, posiblemente no elimine bacterias que no se encuentran en tu vagina pero sí en la taza. No corras el riesgo de exponerte a bacterias y desecha tu copa.
¿Cómo tiro la copa menstrual usada?
Córtala para que nadie más pueda usarla y tírala a la basura. Hay algunos lugares donde, dependiendo del material con el que esté hecha, pueden recibirla para reciclar, pero es poco común. Toma en cuenta que si tu copa menstrual es de silicón, se irá degradando poco a poco. A diferencia de las toallas y tampones que simplemente se rompen en pedazos pequeños, contaminando el suelo y el agua.
Ahora ya sabes cómo cuidar tu copa menstrual y cuándo es momento de cambiarla. Recuerda que Weycup cuenta con tres tallas distintas y está hecha de los mejores materiales de grado médico para garantizar su calidad.