La copa menstrual es la alternativa por la están optando miles de mujeres alrededor del mundo. Aunque al principio era bastante desconocida, poco a poco se ha abierto terreno en el mercado y en la mente de posibles compradoras que aún no se han animado a dar el paso. En este artículo te contamos algunas de las ventajas que tiene la copa frente a otros productos de gestión menstrual.
Es económica
La copa menstrual tiene un precio que inicia entre los 700 y 800 pesos. Lo que hay que tomar en cuenta es que el gasto se hace en una sola ocasión. No tendrás que volver a gastar un solo peso en el tiempo de vida útil de tu copa. Y este tiempo puede ser de hasta 10 años, así que a la larga gastas mucho menos que con otros productos de gestión menstrual.
Una caja de tampones ronda los 40 o 50 pesos por 10 o 14 unidades. Dado que se menstrúa alrededor de 40 años e imaginando que se usara una caja por periodo, estaríamos hablando de 480 cajas a lo largo de tu vida. El gasto mínimo sería de 19,200 pesos por usar tampones. Ya no hagamos el cálculo con los costos de las toallas sanitarias.
Comparado con los 2,800 que te gastarías usando la copa menstrual toda tu vida... pues ya no suena tan caro, ¿cierto?
La copa menstrual es ecológica
Entre tampones y toallas sanitarias, una mujer puede generar 9600 residuos plástico a lo largo de su vida. Todo ese material es, a final de cuentas, no biodegradable. Toma en cuenta también los aplicadores del tampón, la envoltura de las toallas sanitarias, etc. La copa menstrual te puede durar hasta diez años y no es necesario usar aplicador o envolturas plásticas.
Más allá de la basura que se genera, los tampones y toallas sanitarias impactan de manera importante al medio ambiente, porque no se pueden reciclar. Incluso deshacerse de ellos causa daño, porque al quemarse los residuos pueden emitir gases tóxicos.
La copa menstrual, por el contrario, sí es biodegradable. La silicona médica que se utiliza para su fabricación puede ser incinerada y la arena que queda no impacta negativamente al ambiente, pues se degrada con el paso del tiempo sin emitir sustancias nocivas o convertirse en microplástico.
Es más segura que un tampón
El uso de la copa menstrual no se ha asociado con ningún síntoma del Síndrome de Shock Tóxico. Pero con los tampones es un riesgo muy real. Las posibilidades de sufrirlo se hacen mayores cuando se usan tampones de gran absorción o cuando se quedan puestos más de 4 o 6 horas.
Las instrucciones de los tampones te indican elegir la absorbencia más baja, cambiarlo cada 8 horas cuando mucho, no usarlo entre periodos y conocer las señales de advertencia del Síndrome de Shock Tóxico para poder acudir al médico de ser necesario.
En cambio, la copa menstrual puede estar en tu cuerpo hasta 12 horas sin mayor problema que el que empiece a salir la sangre. Con una higiene adecuada, puedes vaciar tu copa cuantas veces quieras y volver a usarla sin riesgo de infecciones.
No interfiere con tus anticonceptivos
La copa menstrual es compatible con el DIU. Este dispositivo se coloca en el útero, mientras que la copa se encuentra en la parte inferior de la vagina. Ninguno entra en contacto con el otro. Pero hay que tener ciertas precauciones para que los hilos que salen del DIU y salen por el cérvix no interfieran ni se muevan al meter y sacar la copa.
El uso de la copa no coincidiría con el del anillo conceptivo, si es que lo usas, pues durante los 7 días de la menstruación no lo traes puesto. Sin embargo, si el sangrado dura más de 7 días, puedes usar la copa teniendo cuidado de que el anillo anticonceptivo no se mueva de su lugar
En el caso de las pastillas, así como otros métodos que no interfieren con el interior de la vagina (como el parche o las inyecciones) se pueden utilizar al mismo tiempo que la copa menstrual. No hay ningún peligro de que la copa se salga ni de que se alteren los efectos anticonceptivos.
La copa menstrual te deja hacer muchas actividades
Puedes dormir con la copa menstrual sin importar qué tanto te muevas, puedes dar las vueltas que quieras y aún así el vacío generado por la copa impedirá que la sangre pueda salir. Incluso puedes ir al baño sin tener que quitártela. Eso sí, a la hora de defecar debes tener cuidado pues si haces mucha fuerza las paredes vaginales se contraen, haciendo que la copa baje un poco. No se saldrá, pero seguramente tendrás que acomodarla de nuevo cuando termines.
Cualquier deporte será fácil de hacer y te sentirás muy cómoda con la copa puesta. También puedes nadar y es muchísimo más cómodo que intentarlo con un tampón, ni se diga una toalla sanitaria. No tendrás que preocuparte por vaciar la copa con mayor frecuencia porque no va a absorber el agua de la alberca.
Ahora que conoces las ventajas de la copa menstrual te invitamos a leer otros de nuestros artículos sobre cómo ponerte la copa o cómo limpiarla, para que tomes la mejor decisión posible para ti y tu cuerpo utilizando productos mexicanos de la más alta calidad.